Nuevamente nublado.
Tiene el sol de su lado
brillando en su casa.
De mi lado el océano
para hundirme en llanto,
en mi casa la muerte;
los desaciertos, el gran intento.
Desnuda sin renacimiento
no sirve mi disfraz.
Mi diseño no es a prueba de agua,
ni de fuego.
A base de aire se anhela libertad
y los candados están en todas partes.
Nunca es fácil conseguir el espacio
siempre es normal no tener invitación
y aún me conformo con detalles
lo que sobra... lo que se me da.
El rayito de luz
la flor que se desprendió.
Atesorando lo mínimo,
porque lo valioso es del lado de la desilusión.
Quien más me conoce
parece desconocerme
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