A veces muchas cosas tienen el mismo nombre
sin embargo, no quiero nombrarlos
a veces las formas son sólo formas, envases
a veces tienes que aparecerte
recordar o acordar hacer un acorde
acordarte de lo acobardado que se puede ser en el amor
acordar un trato de olvido
que como castigo te vuelve a insinuar una bonita situación
que nos pasó,
que ya no volverá.
Acuérdame, soy tan cuerda y sonante
tan acorde y silenciada
más silente que una cuerda.
Recordar los nombres
y mezclar años como en los sueños
y mezclar miedos como en las pesadillas
y cubrir el sueño con un símbolo
y el símbolo con un nombre
acaso cómplice, compañero, amigo, amor
o un nombre de canción
“Hombre y Amigo”
Más que un nombre, un título.
Recuerdo a veces mi niñez
y esas veces repentinas recuerdo también
lo que sentía difícil que ocurriera
pienso en lo que no pensaba
pienso que creía en lo infinito
y aún así, creo que sigo creyendo en la felicidad
y la felicidad para mí creo que tiene muchos nombres
algunos incompatibles
pero que aunque sean innombrables
tienen un sonido que aún vibra con amor.
A pesar de esa muerte que no es muerte
y que tiene otro nombre creciendo...
“Lejanía” viva lejanía.
