lunes, 9 de abril de 2012

La nube y las olas



Verán un espejismo de quietud
oculto el mundo de olas saladas,
el portal quebrado y el invisible ataúd.
Líquidos fugaces navegan lunares
y la razón es el "no sé", la nube de esos lugares,
clima estudiado por mi novata ciencia
de niñez anticipada y muy permanente,
nativa inclinación a lo gris, a lo empalagoso
y a lo floreado o rojo.
Un sorbo a lo perdido, a lo no oído, al silencio.
Tosiendo un ruido que nadie más puede escuchar.
Una mascada a mis dudas y a mis preguntas insolentes,
residentes de mi mente, muy insistentes y resistentes.