jueves, 20 de septiembre de 2012

Marca




Tiene el beso suculento que pide mi bandera de invierno
casi una primavera es poder verlo.
El viento es la coordenada.
Moviendo mi sangre hasta su norte.
Moviendo la luz hasta su ventana.
Sonrojada por el lenguaje instintivo de las manos,
el hielo es quebrado por este encuentro de miradas de sol.
y tengo una dulce sensación
gracias al jardín dorado de un cabello girasol.