El intelecto que usas no transformará tu destino,
quizá parezca una especie de cambio, cuando eliges muerte
pero así no se mueve, ni se genera la suerte.
Tu destino está forjado
y tu libre albedrío lleno de karma;
una acción que parece penar,
no permite cambiar las causas,
los males de tu humanidad.
Elige, Tú, correcta-mente:
De muerte a suerte, de entender a Ser
de pasar a transitar
de magia a milagro
de esfuerzo a natural-mente.
Qué destino planeaste.
Qué semilla plantaste.
Qué línea acomodas.
A cuánto Amor reaccionas.
Cuántas maduras o inmaduras flores arrancaste.
Cuántas cosas no recordaste,
que sin embargo, aún no puedes olvidar.
Tuviste un acuerdo con el sufrimiento
Una firma con el tormento
Una alianza con el “miento”
…de momento, lo que me creo que pienso, voy a abandonar.
