Saboreando la bazofia
de un festín que creí tantas veces mío
tan mío... que lo creía nuestro
sabroso ...
sin embargo estoy tan insatisfecha,
de aquel gusto amargo queda demasiado
pero se endulza de olvido
de la tapada realidad....
no debo mirar atrás... pero ya nada es nuestro
ni siquiera un misero beso...
todo se lo debemos al recuerdo,
a la bastarda costumbre,
a ese impulso que aún se acuerda de nosotros
que nos miente, nos une...
no lo llamemos amor, ni cariño, ni atracción
sólo compañía con un toque de ilusión
ilusión que quiere una vez más, volver al comienzo,
nadie nos llevará, ni tus manos
ni mi forzado olvido,
hemos quedado atascados en un lugar
que jamás hubiera elegido como hogar
tu has decidido, elijamos una fuerte amistad
una solidaria unión...
una cómplice ruptura, tan nuestra!
ha comenzado contigo,
ya se transforma en mí.
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