Fibras y células pulsando vida,
armonizando sistemas
si nos amaramos
desde las uñas
pasando por los ríos de sangre
hasta la cordillera pensante.
Conscientes, de un amor consciente,
seríamos equilibrio habitual.
Habituar el beso de uno mismo
basándonos en una verdad
sin traiciones, sin mentirnos,
propia fidelidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario