Un intacto corazón
roto
que se auto-repara
con Amor
de mí, para sí
desde que nací
con esta alma suave
llorosa.
Dolor insano
que no existe,
que no muere,
que se mueve,
sin suerte,
desterrado
restándose.
Aumenta y desaparece,
demente,
como todo lo que hiere
daña y acaba
fuera del Amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario